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Invisible Beauty Makers

HATER or DOER campaign

Invisible Beauty Makers - HATER or DOER campaign

Anualmente, todos los empleados de Puig eligen los proyectos de jóvenes emprendedores sociales que entraran en el programa Invisible Beauty Makers, el programa de acción social propio de Fundación Puig y Puig, que a través de la mentoría y formación por parte del talento de la compañía, ayudan a jóvenes emprendedores a que sus ideas e iniciativas se consoliden y generen impacto.

Los emprendedores sociales que entran en el programa son aquellos que han sido más votados por todos los empleados de la compañía.

Para cada edición, se nos pide que articulemos el concepto y mecánica de la campaña en la que se informa de los equipos participantes y se insta a votar. El éxito de la campaña se valora por el nivel de participación de votos por parte de los empleados.

Debíamos afrontar la cuarta campaña de llamamiento a la participación y veníamos de un año de resultados de participación moderados y el programa aterrizaba en el headquarter de París. 

Ya no se trataba sólo de informar y proponer sino de seducir y enamorar.

En un estudio previo a la campaña, detectamos aquellos insights que actuaban como freno a la participación, y localizamos un nicho de empleados al que difícilmente podíamos  llegar. Necesitábamos una campaña que sin entrar en temas éticos, ni moralistas, sin pedir de forma directa la participación, hablara, provocara, movilizara. 

Una campaña en la que tuvieras opciones, una campaña de Haters y Doers.

Si bien el tono de la campaña tenía una inspiración de origen digital, casi coloquial, la dirección de arte debía acercarse al mundo de la moda y las fragancias. Necesitábamos que los empleados de la sede de París percibieran que la campaña se  dirigía a ellos. 

Nos servimos del uso del collage como forma artística para  transmitir ideas y conceptos que junto con una tipografía serifa nos situó la campaña a un nivel más exclusivo. 

El collage como forma artística para  transmitir ideas y conceptos

La pieza estrella de la campaña fueron los posters. Diseñados como si se trataran de los posters de un museo de arte contemporáneo o una galería y colocados con cola en paneles gigantes que situamos en las oficinas. Una vuelta al mundo más urbano, cercano al de la promoción de giras y conciertos. 

¿El resultado? 

Un incremento del 76% en la participación de los empleados de Puig.

Invisible Beauty Makers - HATER or DOER campaign
Invisible Beauty Makers - HATER or DOER campaign
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